La tragedia que enluto a un pueblo

Quien iba a saber que nos tocaría la desgracia

La historia, ha registrado sucesos fatales por accidentes, fenómenos naturales, descuido o error humano, lo cierto es que cualquiera es doloroso, cuando en ellas va la perdida de un ser amado, como un padre, el 24 de junio día de San Juan, cuatro familias de la localidad de San Jorge Tezoquipan, del municipio de Panotla, se llenaron de luto, cuando trágicamente, la Banda de Música de San Jorge, sufre un terrible accidente, donde mueren 4 de sus integrantes.

Aquel día, 24 de junio del año de 1989, la banda de música de San Jorge, siendo su director el Sr. Gil Meneses Santa Cruz, fueron contratados para amenizar las festividades, en honor a San Juan Atlangatepec, Tlaxcala, al regresar fueron a dejar a unos compañeros músicos, a la comunidad de San Antonio Tizostoc, y la camioneta en la que viajaban sufre una descompostura mecánica.

Una vez puesta en marcha, recién iniciaba nuevamente su camino, cuando es alcanzada por un camión de la línea ATAH marca MASA modelo Somex, con ruta principal Huamantla-México y viceversa, el peritaje de la Policía Federal de Caminos, indico que el autobús viajaba con velocidad inmoderada y sin guardar distancia de seguridad, lo que provocó el fatal accidente.

Saliendo proyectados los integrantes de la banda, que viajaban en la parte trasera muriendo instantáneamente 3 de ellos y uno más al día siguiente, sus nombres siempre son recordados por sus familiares y músicos de la localidad, está banda, era considerada una de las más grandes del estado, incluso que la banda oficial del gobierno estatal en turno.

Según recuerda el señor Tomás Osorno Valencia, quien se integro a la banda de música en 1959, interpretando la trompeta, entre ojos llorosos, voz entrecortada y sonrisas forzadas, por los recuerdo que vienen a su mente, en la charla comenta, que los integrantes mas viejos le platicaban, de un concurso de bandas, donde la banda de San Jorge, le gano a la banda de música del estado, obteniendo un mayor renombre con este logro.

Me han dejado solo, soy el último de la banda, hace una pausa, limpia sus ojos llorosos, da un profundo suspiro y con voz entrecortada, el sobreviviente de aquel accidente, recuerda ese día trágico: quien iba a saber que nos tocaría la desgracia, fuimos a dejar a unos músicos a Tizostoc, se para la camioneta y nos pide don Gil Meneses empujarla, arranco, nos subimos ya íbamos sobre carretera, cuando un camión de esos que iban a México, nos llega golpeando por atrás y ahí vino la desgracia, todos salimos proyectados, resultando al final 4 difuntos.

Ya no pudimos hacer nada por nuestros compañeros, éramos vecinos del pueblo y amigos, ahí murieron don José Carmen Delgado Hernández, Gerónimo Valencia Quiroz, Julio Pluma Díaz, ellos murieron de forma instantánea y Delfino Cedillo Zapata murió al día siguiente.

Hace una pausa, tratando de disolver el nudo que siente en la garganta, respira y da otro gran suspiro, termina diciendo, me he soñado tocando con la banda, aunque me parecen otros compañeros, aun sigo soñando a mi tío Gerónimo Valencia Quiroz.

Anécdotas, que provocan tragar saliva, como se dice coloquialmente, al escuchar  lo que comenta el Sr. Rosendo Cedillo Delgado, cuando recuerda a su padre Delfino Cedillo Zapata, quien comenzó a sentirse mal horas después del accidente, fue llevado al Hospital General de Tlaxcala, pero debía ser operado en Apizaco, solo tuvo tiempo de salir del hospital, la ambulancia solo dio vuelta a la manzana y falleció, una fractura en la costilla se le incrusta en el corazón y muere a bordo de la ambulancia.

Es muy triste nosotros nos habíamos adelantado, para esperarlo en Apizaco cuando nos avisan que nos regresáramos a Tlaxcala, porque él ya había fallecido, pero no seria solo ese penar ya que la familia Valencia Pérez, tendría un dolor familiar aún mayor.

Misael Valencia Pérez, recuerda: cuando me avisan del fallecimiento de mi papá, inmediatamente me voy a Oaxaca a buscar a mi hermano Héctor, el trabajaba allá en la sierra, cuando regresamos los dos a San Jorge, mi padre ya se había sepultado, no alcanzamos a despedirnos de él.

Sin embargo, hubo tres heridos más, que fueron los señores José Morales Díaz, Dionicio Delgado Hernández y Benito Meneses Quiroz, quien manejaba ese día la camioneta, la comunidad y la región se vestían de luto, se podía sentir tristeza en sus calles, el accidente era comentado en todo el estado, y en el ámbito musical, el Sol de Tlaxcala daba cuenta y publicaba este accidente el día 26 de junio de 1989.

Ya nada se podía hacer, más que acompañar a las familias a darles cristiana sepultura, pero serian 5 los sepultados, ya que el mismo 24 moría el señor Dimas Encarnación Pérez Hernández, por muerte natural, siendo la misa en la explanada, donde se conocía como la placita, por la cantidad de gente que se reunió, gente del pueblo, amigos, familiares, colegas de otras bandas y grupos musicales, sus restos reposan en el Panteón Tres Cruces de esa localidad.

Junio de 1989 marcaría el final, de una de las bandas más grandes y reconocidas del estado en esa época, se calcula que inicio a principios de la década de 1890, incluso en las efemérides que se tienen registradas el 11 de septiembre de 1916 que a la letra dice: El agente municipal de Tezoquipan denuncio ante el presidente municipal provisional Miguel de los Santos, que al amanecer del día 10 llegaron alrededor de 200 hombres bien armados y a caballo, en aquella ocasión se llevaron a cinco músicos.

La efeméride del día 12 de 1916 a la letra dicen: El agente municipal de Tezoquipan denuncio ante el presidente municipal provisional Miguel de los Santos, que como a las cuatro de la tarde, nuevamente ingresaron 50 hombres en busca de más músicos, no obstante que en día de antier se habían llevado a cinco músicos de esa población.

Se piensa que fueron llevados a la zona de la Malinche, ya que ahí se guarecían distintos grupos revolucionarios de aquellos años, para amenizar o realizar alguna tertulia.

Tezoquipan un pueblo unido, aún más en las tragedias que trastocan la tranquilidad de su gente, así lo demuestra un poema que escribió el Profesor Máximo Xochipa Arroyo, en uno de sus párrafos dice; Lloren y lloren mis campanas lloren en esta ocasión, la tristeza nos embarga lloren lloren de dolor, pensamiento que fue entregado al señor Gil Meneses Santa Cruz, último director de la banda San Jorge.

Respetuosamente

Edgar del Razo Morales

Cronista Municipal